Este archipiélago del Pacífico Sur rezuma una rica cultura tradicional famosa por la talla de madera y la elaboración de tejidos "tivaevae". Sus quince islas habitadas destacan por las grutas marinas, el ecosistema tropical y las playas incontaminadas.
Esta gruta kárstica de un kilómetro de extensión es una de las más bellas del archipiélago, ya que las formaciones de cavidades se entremezclan con las raíces de los banianos que penetran en la tierra. La cueva está habitada por las salanganas de las Cook, unas aves endémicas del país.
La mayor de las islas Cook ofrece multitud de posibilidades para practicar deportes acuáticos, desde la pesca al submarinismo, pasando por el esnórquel y el surf. Para embeberse de la cultura isleña, el Te Vara Nui Village ofrece espectáculos de música, baile y gastronomía local.
Se encuentra en Mitiaro y fue el lugar en el que se enfrentaron el ejército Atiu y los guerreros Mitiaro. En la isla, también se puede disfrutar de un chapuzón en la cueva de Vai Nauri.
Rocosa y selvática, la isla de Ma’uke alberga las cuevas de Motuanga, una espesa red de túneles y grutas subterráneas, así como corales fosilizados y campos de flores de tiaré.
Sus aguas transparentes están moteadas por quince islotes de palmas y arena clara desde los que lanzarse a practicar esnórquel.
La estación de los ciclones va de noviembre a marzo, por ello, el turismo se concentra en los meses de abril a octubre, más cálidos y tranquilos. Cada mes de agosto, tiene lugar el Te Maeva Nui, el festival que celebra la independencia de las islas.
Puede viajarse a las islas Cook sin necesidad de solicitar un visado y con independencia de la propia nacionalidad. El tiempo de permanencia máximo sin visado es de treinta y un días.
El aeropuerto principal de las islas se sitúa en Rarotonga. Operados por compañías como Qatar Airways, British Airways y Air New Zealand, los vuelos desde España prevén al menos dos escalas y tienen una duración aproximada de unas 44 h.
Las islas Cook cuentan con hostales, moteles, cabañas y bungalós, además de algunos hoteles más lujosos con "spa". En islas como Mitiaro, puede probarse la experiencia del "itiki", en la que el viajero se aloja en casas locales y comparte durante unos días vida y comida con los lugareños.
Los medios de transporte más habituales de las islas son los taxis, las bicicletas y las motocicletas. Los taxis, de un color verde brillante, aplican una tarifa de unos 3 NZD (1,70 EUR) por kilómetro o, como alternativa, cobran entre 15 NZD y 20 NZD (8,60 y 11,50 EUR) por pasajero.
Rarotonga dispone de un servicio de autobús con una única línea que circula en ambos sentidos. Cubre la circunferencia de la isla en unos 50 min y el billete cuesta unos 4 NZD (2,30 EUR).
Es posible disfrutar de excursiones acuáticas en algunas zonas de costa y en lagunas como las de Muri (Rarotonga) y Aitutaki. Algunos de estos viajes se realizan en barcas tradicionales polinesias.
En las islas principales, como Rarotonga, hay agencias de alquiler de vehículos. Los alquileres parten de 62 NZD (36 EUR) al día y no es imprescindible disponer de un permiso de conducción internacional.
La compañía nacional Air Rarotonga opera vuelos nacionales entre algunas de las islas del archipiélago. El viaje de Aitutaki a Rarotonga dura unos 50 min y cuesta a partir de 129 NZD (74,20 EUR), más o menos.
Buena parte de los hoteles y de las tiendas grandes aceptan el pago con tarjeta, pero es recomendable disponer de dinero en efectivo para pagar las compras cotidianas, especialmente en las islas más pequeñas. Rarotonga y Aitutaki disponen de cajeros automáticos. Un menú del día ronda los 15 NZD (8,60 EUR) y una botella de vino, unos 25 NZD (14,30 EUR).